miércoles, 5 de junio de 2013

Al fin apareció un valiente!


Por Juan Isidro Inoa

Al fin apareció uno que enfrentara al alcalde Gilberto Serulle en la eutanasia que le está practicando al río Yaque del Norte.

Responde al nombre de Álvaro Sosa y es el presidente de la Junta de Vecinos de la Comunidad de Rafey. Lo conocí cuando asumió el mando de su comunidad cuando esta fue inundada por la tormenta Olga.


Ahora lo veo en la Creta de la montaña del costoso material de minas para la construcción que el alcalde de Santiago está extrayendo del río Yaque del Norte. Pero no está allí para ver de más alto la ciudad. Ni para supervisar cómo va la obra.


Alvaro se ha subido encima del material extraído en protesta por la muerte que esa acción le produce a nuestra mayor fuente de agua de todo el Cibao.

Se ha “encaramao” allí para tratar de parar lo que no ha podido parar el fiscal de Medio Ambiente, el ministerio de Medio Ambiente, ni el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, ni los grupos “ecologistas” de Santiago y la región, ni el Plan Estratégico de Santiago 2020 que jura querer salvar el Yaque dormilón.

Desde hace meses, a ese rio que ha disminuido su caudal por la contaminación y la falta de una política ambiental por parte del gobierno central, se le ha venido extrayendo material y llevado a lugares desconocidos.

Aunque el bioanalista Sigfredo Serulle, que es hermano del alcalde, encargado de mantenimiento de la alcaldía, jefe de saneamiento, por lo que pude ver en el lugar, encargado de embellecimiento e ingeniería y todos los otros puestos que no puede asumir directamente el alcalde Gilberto, dice que ese material se ha utilizado para el relleno de el Hoyo de Julia y el relleno en la avenida del Arroyo, todos sabemos que ese no es un material para relleno sino para construcción y que tiene un alto valor.

Desde el principio nos fue sospechoso que el Yaque del Norte se empezara a sanear a mitad de su extensión, porque la sedimentación de rio arriba volvería a caer en el lugar limpiado. Pero que sorpresa justo ahí, donde se comenzó a limpiar hay una mina que no ha sido protestada como la de pueblo Viejo de Cotui, ni como la cementera de Gonzálo, ni como la Loma de Miranda.

El Yaque del Norte no tiene doliente.

Ahhhh siii. Apareció uno. Álvaro Sosa. Y desde temprano recibe el apoyo de los que por la transitada vía cruzan.

Pero también recibe la presión de autoridades y las amenazas de funcionarios y empleados de la alcaldía de Santiago.

¿En cuánto está valorado ese material? ¿A dónde van esos recursos? ¿Quiénes lo apoyarán? ¿No hay intereses encontrados en ese proyecto?

Desde aquí nuestro apoyo a Álvaro Sosa por tan valiente iniciativa.



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