Cuando la gratitud se pierde

Por Juan Isidro Inoa

“El agradecimiento es la parte principal de un hombre de bien”

                                                        Francisco de Quevedo

En el año 1996 Aura Celeste Fernández se le acercó a Vincho Castillo y la Fuerza Nacional Progresista con la intención de a través de esa fuerza y el Frente Progresista llegar hasta el presidente Leonel Fernández. Y lo logró.


Su esposo, Guillermo Moreno,  a través de Abel Rodríguez del Orbe consultor jurídico de la presidencia y amigo de Leonel, logro colocarse como fiscal del Distrito Nacional. Anterior era asistente del fiscal Alexis Joaquín Castillo en el gobierno Joaquín Balaguer.

Para la conformación de la Junta Central Electoral de Subero Isa Leonel se impuso y la impuso como jueza teniendo en contra al actual presidente de la junta Roberto Rosario Márquez y a los senadores de su partido.

No conformes, ambos (Aura y Guillermo) les piden al presidente Leonel que le otorgue una beca para su hijo estudiar en el exterior y Leonel no sólo se la concede, sino que además le nombra a su hijo en el exterior.

Antes de todo eso la familia Moreno-Fernández eran unos desconocidos. Después de eso pasaron a ser figuras públicas.

Hoy Aura Celeste lo más suave que le dice a Vincho Castillo es que es una “bestia”. Contradiciendo todo lo que dijo en el 1996, cuando necesitaba de su mano, y Guillermo Moreno se querella contra Leonel acusándolo de hacer el gobierno más corrupto. Olvidando que su hijo fue parte de ese gobierno.
El que Leonel le concediera a la familia Fernández-Moreno todos eso privilegios no significa que tienen que ser leonelistas. Ni que coincidan con él. Ni que simpaticen por él.  Pero por lo menos debieran dar una muestra de gratitud.