CUANDO LA PASION NOS TRAICIONA

“Los prejuicios son la razón de los tontos”.
  Voltaire

 
Luego de la contundente victoria obtenida por Ramón Paulino en el Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), seccional Santiago, algunos no han sabido asimilar la derrota y se han dedicado a escribir fuera de control.

No han comprendido que su estrategia fallo y que ahí estuvo su derrota.

Los prejuicios, la poca asimilación y la justificación ante sus mentores políticos, no le ha dado cabida a una evaluación sincera.

Por eso para mitigar las reprimendas de sus superiores políticos han recurridos a las mentiras.

Han dicho que Ramón Paulino y su equipo compraron los votos a 4 mil y 5 mil pesos, de ser así, estamos hablando de casi un millón de pesos. ¿Quién gastaría eso?

Suponiendo que fuera verdad. ¿No tienen los periodistas de Santiago dignidad para votar por conciencia?

Da pena que a profesionales los traten de esa manera.

Sus “estrategas” saben que las elecciones la tenían perdidas desde que comenzó el proceso de campaña entre los periodistas, por eso su campaña se basó en la descalificación, la desesperación y en la campaña sucia.

Si quienes hoy subestiman la victoria de Paulino reflexionaran fríamente y se sinceraran con la clase periodística, los escritos fueran otros.

Dijeran que estuvieron dirigidos por la altas instancias del el PRD e Hipólito Mejía.

Dijeran que el alto mando de comunicación de Hipólito Mejía se trasladó a Santiago a dirigir infructuosamente su campaña.

Dijeran que en la plaza Olímpica, frente al local del CDP, se instalaron desde las 8:00 de la mañana seis connotados dirigentes del PRD, entre los que se encontraban Lucildo Gómez jefe de comunicación de la candidatura de Hipólito Mejía y el PRD, Luís González Fabra, jefe de comunicación del cabildo perredeista de Santiago y ex director de prensa de la presidencia del gobierno de Hipólito Mejía, entre otros.

Dijeran que cada dos horas Nelson Peralta tenía que ir a esa plaza a dar un informe de cómo iba el proceso.

Dijeran que la dirigente perredeista Miguelina Alba fue en varias ocasiones a trazar pautas, sin ella ser periodista.

Dijeran que a las 5:52 de la tarde Tony Rodríguez abandonó el centro de votación convencido de que había perdido. Aunque pensaba que era por 31 votos y no por 69 como fue el resultado final.

Dijeran que las elecciones las perdieron antes de las ocho de la mañana cuando, a sabiendas de su futura derrota quisieron incidentar el inicio de las votaciones impidiendo que se votara bajo aire acondicionado y queriendo que se quitara una valla de Ramón Paulino. Argumentos usados sólo en momento de derrota.

Dijeran que haciendo algo propio de los perredeístas, a la hora del conteo bajaron el swisher de la energía eléctrica para impedir el conteo, recordando el negro episodio de Pacheco y Guido en la cámara de diputados. Ninguno se preocupó por buscar alumbrado, sólo los representantes de Paulino buscaron linternas y focos para que todo saliera bien.

Dijeran que el apoyo de Juan Caros Bisonó a Ramón Paulino fue la estocada mortal que sacó de circulación su candidatura.

Dijeran que el 60.44% del los cepadeistas de Santiago reconocieron la positiva labor realizada por Paulino al frente del colegio y un gran porcentaje de ellos mismos que lo reconocen, pero que por militancia política y presiones no lo respaldaron.

Dijeran a sus mentores políticos, que definitivamente Ramón Paulino ganó en buena lid.

Ahora... a seguir trabajando.