En mi adolescencia -hace bastante de eso- solíamos enamorarnos solos, de las adolescentes y hasta de las ya señoritas de barrio. Pero este enamoramiento lo hacíamos por entre las “tripas”, nunca nuestro gran amor lo sabía aunque quizás ellas estuvieran en la misma situación.
Para desahogarnos y para sentirnos bien se lo comentábamos a nuestros amiguitos, y junto a ellos, y muchas veces lo hacíamos solos, buscábamos una margarita y la deshojábamos con el “me quiere… no me quiere”. Cuando el resultado era negativo, buscábamos otra hasta quedar con la truqueada satisfacción de que “…me quiere”.
Este recuerdo me viene a la cabeza a propósito de la tardanza en la escogencia por parte del candidato presidencial del PLD Danilo Medina, de su compañera de boleta para las elecciones del 20 de mayo del año que viene.
Digo compañera, porque es un secreto a voces que será la actual primera dama de la república Margarita Cedeño de Fernández. Y digo tardanza porque no le veo nada de estratégico la elección tardía de la misma.
Si el equipo de estrategia lo que busca es causar un impacto mediático con su escogencia, ya este no lo tendrá, porque se da como un hecho que lo será Margarita.
Sin dudas que la candidatura de Danilo Medina ha crecido, y quizás dentro de su estrategia esté la de crecer lo mas que pueda solo, pero en asuntos electorales lo mas importante es crecer sin límites a como de lugar y conseguir la mayor cantidad de adeptos primero que los demás. Que los demás se vean obligados a tratar de conquistar los tuyos y no tú los de ellos.
La prolongación de la escogencia de la primera dama como candidata vicepresidencial del PLD, es como si Danilo Medina tuviera una fábrica con una línea de producción apagada, mientras la que está en funcionamiento no da abasto a la demanda.
Ya es tiempo de que Danilo abra ese otro frente de trabajo, esa otra maquinaria para que Margarita se lance en busca del voto de las madres solteras, que tanto ha apoyado, de las madres estudiantes, las amas de casas que ha ayudado con su programa “Progresando”, Los y las jóvenes que se han beneficiado de su programa de estudios tecnológico, los favorecidos con sus distintos programas de solidaridad.
Ya es el momento de que Margarita salga a la calle a buscar el voto de una sociedad que la valora sin rigor partidario, de buscar el voto no peledeista que la ve con agrado, que le “cae bien”.
Ya es tiempo de regar “margarita” por todo el país.
Seguir retrasándolo es aumentar el rumor del deshoje de la margarita por parte de una morbosa población que se pregunta… Danilo “La quiere… o no la quiere”.
Para desahogarnos y para sentirnos bien se lo comentábamos a nuestros amiguitos, y junto a ellos, y muchas veces lo hacíamos solos, buscábamos una margarita y la deshojábamos con el “me quiere… no me quiere”. Cuando el resultado era negativo, buscábamos otra hasta quedar con la truqueada satisfacción de que “…me quiere”.
Este recuerdo me viene a la cabeza a propósito de la tardanza en la escogencia por parte del candidato presidencial del PLD Danilo Medina, de su compañera de boleta para las elecciones del 20 de mayo del año que viene.
Digo compañera, porque es un secreto a voces que será la actual primera dama de la república Margarita Cedeño de Fernández. Y digo tardanza porque no le veo nada de estratégico la elección tardía de la misma.
Si el equipo de estrategia lo que busca es causar un impacto mediático con su escogencia, ya este no lo tendrá, porque se da como un hecho que lo será Margarita.
Sin dudas que la candidatura de Danilo Medina ha crecido, y quizás dentro de su estrategia esté la de crecer lo mas que pueda solo, pero en asuntos electorales lo mas importante es crecer sin límites a como de lugar y conseguir la mayor cantidad de adeptos primero que los demás. Que los demás se vean obligados a tratar de conquistar los tuyos y no tú los de ellos.
La prolongación de la escogencia de la primera dama como candidata vicepresidencial del PLD, es como si Danilo Medina tuviera una fábrica con una línea de producción apagada, mientras la que está en funcionamiento no da abasto a la demanda.
Ya es tiempo de que Danilo abra ese otro frente de trabajo, esa otra maquinaria para que Margarita se lance en busca del voto de las madres solteras, que tanto ha apoyado, de las madres estudiantes, las amas de casas que ha ayudado con su programa “Progresando”, Los y las jóvenes que se han beneficiado de su programa de estudios tecnológico, los favorecidos con sus distintos programas de solidaridad.
Ya es el momento de que Margarita salga a la calle a buscar el voto de una sociedad que la valora sin rigor partidario, de buscar el voto no peledeista que la ve con agrado, que le “cae bien”.
Ya es tiempo de regar “margarita” por todo el país.
Seguir retrasándolo es aumentar el rumor del deshoje de la margarita por parte de una morbosa población que se pregunta… Danilo “La quiere… o no la quiere”.